03/08/2022

Adopción de los resultados del EPU en la 50ª sesión del CDH: algunos aspectos destacados

UN

Los días 30 de junio y 4 de julio, la 50ª Sesión del Consejo de Derechos Humanos vio la adopción de los resultados del Examen Periódico Universal (EPU) de la 40ª Sesión del Grupo de Trabajo.

Los Estados que vieron adoptados los resultados de su examen son Togo, República Árabe Siria, Islandia, República Bolivariana de Venezuela, Zimbabue, Lituania, Uganda, Timor-Leste, República de Moldavia, Sudán del Sur, Haití y Sudán.

Durante las adopciones del EPU, 2'392 recomendaciones fueron aceptadas en su totalidad de las formuladas a los Estados examinados durante la 40ª sesión del Grupo de Trabajo del EPU, lo que representa una tasa de 78,58% de aceptación.

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Durante el debate interactivo de tres horas, las delegaciones señalaron una serie de logros positivos de Togo. Entre ellos, el énfasis puesto por el Gobierno en la lucha contra la corrupción, la trata de personas y el establecimiento de límites a los mandatos del presidente, los diputados, los senadores y los gobiernos locales. No obstante, la situación de la libertad de expresión es preocupante, ya que los periodistas siguen siendo objeto de numerosas amenazas, incluida la detención arbitraria.

Se alienta a la República Árabe Siria a que continúe sus esfuerzos para combatir las desapariciones forzadas, las detenciones arbitrarias y el uso de la tortura, y a que promueva los derechos de los niños, las mujeres y los refugiados. Se señaló que el país ha aceptado la mayoría de las recomendaciones y espera que se apliquen, como las referidas a "seguir proporcionando al personal humanitario un acceso sin obstáculos a la población que necesita asistencia".[1]

Se felicitó a Islandia por ser el primer país del mundo que ha conseguido una ley de igualdad salarial. No obstante, se pidió a Islandia que tome medidas concretas para luchar por los derechos de las personas con discapacidad, que adopte las medidas legislativas ya propuestas para combatir la violencia de género, doméstica y sexual y que ratifique la Convención Internacional sobre la Protección de los Derechos de todos los Trabajadores Migrantes.

Se alentó a la República Bolivariana de Venezuela a continuar sus esfuerzos, en particular para garantizar la independencia e imparcialidad de los abogados y los jueces. Se observó con pesar que no se aceptaron las recomendaciones a favor de la libertad de expresión, en particular sobre los ataques y las detenciones arbitrarias de periodistas que ejercen su derecho a la libertad de expresión. Se reconoció, sin embargo, que Venezuela estaba haciendo esfuerzos para promover los derechos humanos en el país. El Secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de Derechos Humanos informó de que se estaba elaborando un segundo Plan Nacional de Derechos Humanos con el apoyo de la OACDH.

Se elogió el compromiso de Zimbabue con el proceso del EPU. Sin embargo, se señaló que muchas de las recomendaciones se referían sobre todo a temas como las cuestiones de género, la comunidad LGBTQ+ y los migrantes. Se señaló que hay una necesidad urgente de actuar en algunas áreas, especialmente en relación con la justicia infantil y el acceso a la educación, así como los derechos de las personas pertenecientes a la comunidad LGBTQ+, ya que los actos violentos basados en el género y la orientación sexual son cada vez más pronunciados. También se señaló que se está reduciendo el espacio cívico y democrático en el país, lo que preocupa de cara a las elecciones presidenciales de 2023.

Se felicitó a Lituania por aceptar la mayoría de las recomendaciones y se le invitó a seguir intensificando su desarrollo en el ámbito de los derechos humanos. En particular, se señaló que se habían tenido en cuenta las recomendaciones sobre los derechos de los niños, incluida la abolición de los castigos corporales. No obstante, se dijo que era urgente reconocer los derechos de las familias homoparentales y luchar por la protección de las personas transgénero, así como la necesidad de reforzar las medidas estratégicas para combatir la discriminación y la violencia contra las mujeres y garantizar los derechos de las personas con discapacidad.

Se animó a Uganda a hacer realidad la salud y los derechos sexuales y reproductivos, a promover la igualdad de género y a introducir la educación sexual para combatir las altas tasas de embarazo adolescente, la mutilación genital y la propagación del VIH. También se le pidió que aplicara sin demora las recomendaciones sobre los derechos de las minorías, los derechos de las personas LGBTQ+ y la protección de los defensores de los derechos humanos, así como que tomara medidas para combatir el acoso y la persecución de los abogados.

Se elogió a Timor Oriental por aceptar la mayoría de las recomendaciones recibidas, incluido su compromiso de ratificar la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y el Protocolo Facultativo de la Convención contra la Tortura y los Tratos Crueles. Se alentó al país a proseguir sus esfuerzos en materia de salud y derechos sexuales y reproductivos y a abordar la violencia de género contra las mujeres y las niñas. Se lamentó que no se aceptara la recomendación sobre la prohibición de los matrimonios infantiles. También se le pidió que reforzara el acceso a la educación, que mejorara los servicios de acceso a los centros de salud para todos sus ciudadanos y que luchara por la libertad de expresión.

Se ha elogiado a Moldavia por sus esfuerzos, en particular por el refuerzo de las instituciones nacionales de derechos humanos, así como por los esfuerzos para promover los derechos de las mujeres y la igualdad de género. No obstante, deben continuar los esfuerzos, especialmente para garantizar la independencia del poder judicial y también para asegurar que nadie sufra más desapariciones arbitrarias.

Aunque se elogió a Sudán del Sur por aceptar la mayoría de las recomendaciones y por aplicar el acuerdo de paz revitalizado, se alentó al país a que se esforzara por lograr la estabilidad política y a que se hiciera más por reducir el nivel de violencia de género, siendo las mujeres y las niñas especialmente vulnerables. También se instó a Sudán del Sur a trabajar por la abolición de la pena de muerte y a garantizar los derechos de libertad de expresión y la seguridad de los periodistas.

Se pidió a Haití que adoptara un marco normativo para proteger a los defensores de los derechos humanos y se destacó el aplazamiento del proyecto de Código Penal. También se pidió a Haití que superara los problemas que plantean el trabajo infantil y la violencia sexual contra las mujeres. No obstante, se acogió con satisfacción el refuerzo de la seguridad y la puesta en marcha de procedimientos para luchar contra la corrupción.

Sudán ha levantado el estado de emergencia y se le felicitó por la apertura de una oficina del ACNUDH y la creación de una institución nacional de derechos humanos. La cooperación de Sudán con el Consejo de Derechos Humanos ha sido muy bien valorada. El gobierno sigue esforzándose en las reformas institucionales y legales y en la ratificación de los convenios internacionales de derechos humanos. Los abusos contra los niños, incluidos los matrimonios forzados, también son motivo de preocupación. Sin embargo, se acogieron con satisfacción los esfuerzos para combatir la mutilación genital femenina y la criminalización del tráfico de personas. También se elogió al país por adoptar la Convención contra la Tortura y por abolir todas las formas de castigo corporal.

[1] Informe del Grupo de Trabajo sobre el Examen Periódico Universal - República Árabe Siria